Al igual que en muchas otras áreas, en la preparación física y en los entrenamientos personales, existen profesionales formados y cualificados y gente que, sin formación ni experiencia, ofrece servicios de entrenamiento personal con agresivas estrategias de marketing, con una estética impresionante y la falsa promesa de convertir tu cuerpo en un calco del suyo.
Hay que tener claro qué profesionales hay que buscar, y hay que tener muchísimo cuidado, por las siguientes dos razones de vital importancia:
- El entrenamiento personal mal realizado, puede generar en patologías, dolencias y todo tipo de lesiones que irán cada vez a más. Tu entrenador personal debe de tener amplios conocimientos en fisionomía, estiramientos y corrección postural, y enseñarte la más depurada técnica a la hora de realizar los ejercicios. Debería de estar contemplado como una Actividad Sanitaria, pero aún hay muchos prejuicios desde el "sector salud" sobre el deporte y sus profesionales, distintas federaciones están luchando porque sea reconocido y se le dé la importancia que merece. El deporte se realiza por ocio, pero que nadie dude que también por salud.
- La preparación física es una cosa muy seria porque influye directamente en nuestra salud. Un entrenador personal debe de trabajar por encima de todo, para buscar la salud del cliente, no la de su propio bolsillo, ni su comodidad. Haceros un chequeo completo antes de empezar un plan de entrenamiento, para ver vuestro estado físico, valorarlo, y en base a ello, que tu entrenador te elabore un plan personalizado. Nada de reciclar ni aprovechar rutinas estándar o diseñadas para otras personas.
Por lo tanto, al buscar un profesional, busca lo siguiente:
-Gente con formación oficial homologada (Licenciados en INEF, Diplomados en Educación Física, Técnicos Superiores TAFAD, Entrenadores Titulados en las respectivas Federaciones Nacionales...).
-Gente con experiencia y referencias que puedas contrastar. Infórmate, habla con clientes suyos, pide opiniones.
Así que amigos, no lo duden y pregunten, infórmense y no duden en preguntar al profesional por sus titulaciones, que si las tiene, se lo acreditará encantado. En caso contrario...